La experiencia del CERN se basa ampliamente en tres campos técnicos: aceleradores, detectores e informática. Detrás de estos tres pilares de la tecnología, se encuentra una gran cantidad de áreas de especialización: desde la criogenia hasta los vacíos ultra altos, desde el seguimiento de partículas y el monitoreo de la radiación hasta la superconductividad y muchas más. Estas tecnologías, y la experiencia humana asociada a ellas, se traducen en un impacto positivo en la sociedad en muchos campos diferentes: aplicaciones médicas y biomédicas, aeroespacial, seguridad, medio ambiente e industria 4.0.
Con un enfoque en el futuro, también hemos identificado tecnologías emergentes y al despliegue de los diferentes tipos de innovación a las que el CERN está contribuyendo.
En este reunión queremos analizar cómo se desarrolla el proceso de transferencia en este centro de referencia y observar posibles soluciones en nuestro ámbito de actuación.
A lo largo de los años, el CERN siempre ha estado abierto a las comunidades científicas de todas las naciones, superando barreras políticas. Los científicos del CERN trabajaron con sus homólogos soviéticos y estadounidenses durante la Guerra Fría. No es casualidad que muchos países de Europa del Este se unieran al CERN poco después de la caída del Muro de Berlín. Y hoy, científicos de todas las regiones del mundo se codean en el Laboratorio.
El CERN fue el prototipo de la colaboración científica en Europa y ha dado lugar a organizaciones con competencias que van desde la astronomía hasta la biología. La última organización en seguir los pasos del CERN es SESAME, un laboratorio para Oriente Medio en Jordania. Que Israel y la Autoridad Palestina estén entre los miembros fundadores de SESAME puede parecer sorprendente, pero quizás no más que los países de Europa que se unieron tras la Segunda Guerra Mundial para fundar el CERN.
Una gran cantidad de ingenieros, técnicos y científicos desarrollan tecnología y experiencia novedosas que se pueden aplicar a campos distintos de la física de altas energías . Esto es posible gracias a la comunidad del CERN, que desarrolla la experiencia y la comparte con la sociedad. El CERN también colabora con la industria , incluidas las grandes empresas, las pymes o las nuevas empresas, y se relaciona con otras partes interesadas, como los responsables políticos , especialmente los que actúan en los Estados miembros del CERN.
Los avances científicos del CERN empujan las fronteras de la tecnología, lo que tiene un impacto positivo en la sociedad a nivel mundial. Aunque la misión principal del Laboratorio es la investigación fundamental en física de partículas, también tiene la misión de capacitar a la próxima generación de científicos y unir a las naciones. La transferencia de tecnologías y experiencia del CERN a la sociedad es una parte integral de estas actividades, proporcionando soluciones novedosas en muchos campos.